La ansiedad puede presentarse de varias formas, lo que tienen en común dichas formas es que suelen responder a una intolerancia a la incertidumbre y tener ciertas características psicológicas y físicas comunes.Como sucede con varios problemas de salud mental, todos experimentamos ansiedad a veces. Que pase a ser un problema depende de la cantidad y naturaleza de la misma, si quieres saber más sobre cómo la ansiedad se vuelve patológica.
La capacidad para prestar atención de los seres humanos resulta que es bastante limitada.
Pero, ¿qué entendemos por atención? De una manera informal, voy a definir la atención como la habilidad para registrar los diferentes estímulos que forman parte del contexto en el que nos encontramos inmersos.
Otra
forma de entender la atención es como un sistema de filtro, ya que
nuestro cerebro, en el día a día se ve obligado a tamizar la realidad
para impedir que la avalancha de estímulos que caracteriza a la vida
moderna provoque una saturación y colapso del sistema de procesamiento
de la información del cerebro.
De hecho, se estima que en un mismo instante podemos percibir hasta 11 millones de unidades de información, pero de esa cantidad, solo 40 unidades llegan a la esfera de la conciencia.
El mundo de la publicidad y el marketing hacen un aporte interesante en ese sentido. Se calcula que en nuestra vida, si tenemos la suerte de llegar a los 60 o 65 años, habremos visto alrededor de 2 millones de anuncios televisivos. Eso equivale a 8 horas de anuncios diarios, durante los 7 días de la semana, por un periodo de 6 años.
Pero, ¿qué entendemos por atención? De una manera informal, voy a definir la atención como la habilidad para registrar los diferentes estímulos que forman parte del contexto en el que nos encontramos inmersos.
De hecho, se estima que en un mismo instante podemos percibir hasta 11 millones de unidades de información, pero de esa cantidad, solo 40 unidades llegan a la esfera de la conciencia.
El mundo de la publicidad y el marketing hacen un aporte interesante en ese sentido. Se calcula que en nuestra vida, si tenemos la suerte de llegar a los 60 o 65 años, habremos visto alrededor de 2 millones de anuncios televisivos. Eso equivale a 8 horas de anuncios diarios, durante los 7 días de la semana, por un periodo de 6 años.